jueves, 13 de enero de 2011

Homenaje de Imaginaria a María Elena Walsh

In Memoriam

“Yo me nazco, yo misma me levanto,

organizo mi forma y determino

mi cantidad, mi número divino,

mi régimen de paz, mi azar de llanto.

Establezco mi origen y termino

porque sí, para nunca, por lo tanto.

Soy lo que se me ocurre cuando canto.

No tengo ganas de tener destino.”

La escritora María Elena Walsh falleció el 10 de enero de 2011. Sin su presencia física, nos seguirá acompañando la obra de una mujer que marcó un antes y después en la literatura argentina dedicada a los niños.

En Imaginaria, hace unos años le rendimos homenaje con un amplio informe. Dentro del mismo, en el artículo “El placer de crear, con integridad”, la especialista Alicia Origgi —autora del libro Textura del disparate. Estudio crítico de la obra infantil de María Elena Walsh (Buenos Aires, Lugar Editorial, 2004)— comentaba:

“La obra de Walsh es original por el particular procesamiento de distintos formantes poéticos, que con sus innovaciones retóricas, temáticas e ideológicas abrieron un ciclo dentro del ámbito de obras con destinatario infantil en Argentina. Excedió el campo estrictamente literario del libro para chicos, pues exploró con éxito diversas formas de expresión como el periodismo, la canción, el teatro, el cine y el teleteatro. Es una de los pocos intelectuales de su época que encaró con decisión y lucidez la tarea de intentar una reubicación del escritor respecto de los medios masivos. Su actitud ante el folklore y la música popular nacionales superó el mero intento de investigación y preservación de formas expresivas, pues esas formas fueron incorporadas a su poética como elementos activos y modernos, despojados de toda intención ‘pintoresquista’.

Sus artículos de opinión publicados en prestigiosos medios periodísticos abarcan desde la mirada viajera, testimoniando sus recorridos por América y Europa, la defensa de la mujer, la ausencia de políticas culturales, la denuncia de la censura en todas sus formas y el cuestionamiento del autoritarismo y los prejuicios. El artículo ‘Desventuras en el País-Jardín-de-Infantes’, que apareció en el diario Clarín el 16 de agosto de 1979 es una declaración de deberes y derechos del intelectual, un manifiesto en contra del silencio impuesto por el gobierno de facto en Argentina que le valió ser excluida del circuito oficial de radio y TV, en ese entonces en manos del estado.

La democracia reinstalada en 1983 la encontró trabajando en la Dirección de Cultura de SADAIC, sociedad de autores y compositores argentinos (…).

Su texto ‘La pena de muerte’, también aparecido en el diario Clarín durante el gobierno del Presidente Menem, el 12 de setiembre de 1991, causó sensación por su decidida postura opositora a esa medida. Fue innumerable la cantidad de público que, adhiriendo a la manifestación de la escritora, requería la firma del poema trayendo una copia del mismo, en el stand de la Feria del Libro de abril del ’92 en Buenos Aires.”

En el citado informe los lectores también podrán encontrar:

•“Fue revolucionario pensar que la poesía no debía tener contenido didáctico”. Entrevista con María Elena Walsh, por Alicia Origgi.
•La obra de M. E. Walsh: Bibliografía, discografía, premios, etc., recopilada por Roberto Sotelo.
Además, dedicamos varios artículos al análisis de su producción literaria:

•AlfaWalsh: toda la obra infantil de María Elena Walsh reunida en una colección.
•Un acontecimiento editorial que completa la obra de María Elena Walsh: dos volúmenes recogen su teatro: Canciones para Mirar y Doña Disparate y Bambuco, por Nora Lía Sormani.
•Edward Lear, los limericks, y el Zoo Loco de María Elena Walsh, por Marcela Carranza.
Y destacamos “El envés del revés”, dossier sobre María Elena Walsh —con artículos de diversos escritores y especialistas latinoamericanos, que publicó Cuatrogatos, el portal de libros para niños y jóvenes dirigido por los cubanos Sergio Andricaín y Antonio Orlando Rodríguez.

Literatura Infantil y Juvenil UNaM "Una Literatura de arte Mayor"

Ya lo Decía María Adelia Diaz Ronner "¿de qué trata la literatura para chicos? Pues ¡vamos al grano ya! Trata de muchas cosas que nunca están superpuestas: de las palabras y las multiformas que cada escrito les otorga. Porque la literatura trata del lenguaje de sus resplandores en pugna, si se me permite describir casi poéticamente el oficio de escribir. Aunque suene extravagante, en pocas ocasiones se ubica al lenguaje como el protagonista específico de una obra literaria infantil. ¿Por qué expreso esta hipótesis de lectura? Porque, en general, se plurirramifica el tratamiento de un producto literario para los chicos abordándolo desde disciplinas que distraen del objetivo —y la especificidad, en suma— de todo hecho literario: el trabajo con la lengua que cada escrito formaliza."